Bitcoin Viola el Teorema de Regresión de Mises
El Fin del Teorema de Regresión, Implicaciones para la Praxeología Monetaria
Escribo esto porque estoy en desacuerdo con el artículo del Mises Institute y considero que su planteo es errado.
En la historia temprana de Bitcoin, específicamente en los foros donde se desarrollaron las discusiones filosóficas y de desarrollo inicial (Bitcoin Talk), emergió una controversia que continúa sin resolverse: ¿viola Bitcoin el Teorema de Regresión de Mises? Esta pregunta no es meramente académica, sino que constituye un desafío existencial para la coherencia teórica de la escuela austriaca de economía.
El forista "xc" en aquellos primeros foros planteó una defensa de Bitcoin argumentando que no viola el teorema, definiendo su propósito como resolver "una aparente paradoja del dinero: ¿cómo tiene el dinero valor como medio de intercambio si es valorado porque sirve como medio de intercambio?"
Pueden leer el posteo original haciendo click en este enlace: Bitcoin does NOT violate Mises' Regression Theorem.
Deconstrucción Szaboniana
Para abordar esta cuestión con el rigor necesario, empleare lo que denominamos "deconstrucción Szaboniana", inspirada en el trabajo hermenéutico de Nick Szabo. Este enfoque reconoce que cada interpretación añade capas de complejidad ("envolturas") al objeto original, y que debemos desenvolverlas sistemáticamente para llegar a la esencia del problema.
Utilizando la notación propuesta:
xc{Rothbard{teorema de regresión de Mises}}
Cada nivel de interpretación añade distancia conceptual del objeto original, siguiendo la medida de complejidad algorítmica que Szabo adaptó de Li y Vitanyi.
El Teorema de Regresión de Mises: Formulación Original
En La Teoría del Dinero y Crédito, Mises establece claramente:
Si el valor de intercambio objetivo del dinero debe siempre estar vinculado con una ratio de intercambio de mercado preexistente entre dinero y otros bienes económicos (ya que de otro modo los individuos no estarían en posición de estimar el valor del dinero), se sigue que un objeto no puede ser usado como dinero a menos que, en el momento cuando su uso como dinero comienza, ya posea un valor de intercambio objetivo basado en algún otro uso.
Esta formulación establece la necesidad de un valor independiente de la función monetaria antes de que un objeto pueda servir como dinero. El teorema opera bajo el principio de continuidad histórica de precios, donde cada valuación presente depende de valuaciones previas en una cadena ininterrumpida que debe remontarse a un uso no-monetario original.
La Paradoja de Bitcoin
El Caso de Laszlo Hanyecz
El 18 de mayo de 2010, Laszlo Hanyecz publicó su famosa oferta: "Pagaré 10,000 bitcoins por un par de pizzas... a lo que apunto es obtener comida entregada a cambio de bitcoins donde no tengo que ordenar o prepararla yo mismo". Este evento resulta crucial porque representa uno de los primeros intercambios de Bitcoin por bienes reales, pero ocurrió en un contexto donde no existía un precio de mercado establecido para Bitcoin. Paradójicamente, Laszlo se encontraba en posición de estimar el valor de su Bitcoin, contradiciendo directamente la premisa misesiana de que los individuos no pueden estimar el valor del dinero sin una ratio de intercambio preexistente. Más significativamente, Bitcoin funcionaba efectivamente como dinero sin haber tenido jamás un valor de mercado basado en usos no-monetarios.
Ausencia de Valor de Uso No-Monetario
Bitcoin carece fundamentalmente de cualquier utilidad práctica fuera de su función como medio de intercambio. No puede usarse como joyería, carece de aplicaciones industriales, no posee valor ornamental, y su única función consiste en facilitar transacciones. Esta característica lo distingue radicalmente de todos los dineros históricos que Mises analizó, los cuales invariablemente poseían usos alternativos que justificaban su valuación inicial en el mercado.
Esta característica viola directamente el requisito misesiano de valor de intercambio objetivo basado en "algún otro uso".
Análisis de las Tentativas de Re-solución
La Construcción de Jeffrey Tucker
Tucker intenta resolver la paradoja argumentando que "Bitcoin es tanto un sistema de pago como un dinero", proporcionando así una utilidad no-monetaria. Esta construcción resulta problemática porque borra la distinción misesiana fundamental entre bien de mercado y dinero. Mises trabajó cuidadosamente para establecer esta diferencia conceptual, y la propuesta de Tucker efectivamente la anula al sugerir que algo puede ser simultáneamente dinero y no-dinero. Además, esta construcción no resuelve el problema fundamental sino que simplemente lo redefine, añadiendo una capa interpretativa que carece de coherencia teórica dentro del marco austriaco establecido.
La Propuesta de Davidson y Block
Davidson y Block argumentan que el teorema de regresión "es relevante solo cuando un nuevo medio de intercambio surge de una economía de trueque puro". Esta interpretación presenta serias deficiencias al contradecir la formulación explícita de Mises sobre dinero fiat y crédito. Mises fue categórico al declarar que "ningún dinero fiat podría jamás venir a existencia si no satisficiera esta condición", refiriéndose a la necesidad de valor no-monetario previo. La construcción de Davidson y Block ignora esta declaración inequívoca y constituye una construcción sintética que añade elementos conceptuales no presentes en el texto original. Efectivamente, están modificando la teoría para acomodar Bitcoin en lugar de reconocer la tensión genuina que representa.
El Reductio ad Absurdum
Si aceptamos que Bitcoin es dinero según las definiciones austriacas, que Bitcoin nunca tuvo valor de mercado no-monetario, y que el teorema de regresión es válido universalmente, entonces llegamos a una contradicción lógica que invalida al menos una de estas premisas. Dado que las primeras dos proposiciones son empíricamente verificables a través de la observación directa del funcionamiento de Bitcoin y su historia, la tercera proposición debe ser necesariamente cuestionada. Esta contradicción no puede resolverse mediante construcciones interpretativas que alteren el significado original del teorema sin comprometer la integridad intelectual del marco teórico austriaco.
Implicaciones para la Escuela Austriaca
El Problema de Completitud
La situación presenta un paralelo instructivo con los teoremas de incompletitud de Gödel en matemáticas. La escuela austriaca enfrenta una elección fundamental entre mantener la consistencia de su sistema teórico admitiendo que el teorema necesita revisión, o preservar la completitud aparente del sistema mediante construcciones ad hoc que comprometen la coherencia lógica. Esta tensión es particularmente aguda porque la escuela austriaca fundamento su autoridad en la coherencia lógica y la elegancia teórica de sus proposiciones.
La Respuesta de Satoshi
Notablemente, Satoshi Nakamoto abordó directamente esta cuestión en sus escritos, proponiendo que un objeto escaso sin valor intrínseco podría obtener valor "circularmente" a través de expectativas de utilidad futura. Esta perspectiva desafía frontalmente las asunciones miseseanas.
Praxeología y Validación Empírica
Mises fundamentó su teoría económica en la praxeología, declarando que sus teoremas son "perfectamente ciertos e incontestables, como los teoremas matemáticos correctos". Sin embargo, la existencia de Bitcoin presenta un contraejemplo natural que desafía esta certeza apodíctica. La tensión surge porque la praxeología rechaza por principio la falsificación empírica, mientras que Bitcoin constituye evidencia empírica observable de un dinero sin origen no-monetario. Esta situación compromete la coherencia lógica interna del sistema austriaco, creando una paradoja entre el método praxeológico y la realidad observable del fenómeno monetario digital.
La Necesidad de Re-solución
Mi análisis demuestra que Bitcoin viola inequívocamente el Teorema de Regresión de Mises tal como fue formulado originalmente. Las tentativas de resolver esta contradicción mediante construcciones sintéticas resultan insatisfactorias porque alteran el significado original del teorema, introducen distinciones ad hoc no presentes en Mises, y comprometen la elegancia teórica del sistema austriaco. Estas construcciones representan más bien esfuerzos desesperados por preservar la coherencia aparente del sistema que reconocimientos honestos de sus limitaciones.
Tres Caminos Posibles
El Instituto Mises enfrenta tres opciones fundamentales. La primera consiste en la reformulación teórica, reconociendo que el teorema requiere modificación sustancial para acomodar la realidad de los dineros digitales nativos como Bitcoin. La segunda opción implica la restricción del alcance del teorema, limitando su aplicabilidad a contextos pre-digitales y reconociendo que las innovaciones tecnológicas han creado nuevas categorías monetarias. La tercera alternativa sería la negación, manteniendo que Bitcoin no constituye verdadero dinero, aunque esta posición resulta cada vez más insostenible dada la evidencia empírica de su funcionamiento efectivo como medio de intercambio, unidad de cuenta y depósito de valor.
Reflexión Final
Bitcoin representa más que una innovación tecnológica; constituye un experimento natural que pone a prueba nuestros marcos teóricos más fundamentales sobre el dinero. La respuesta de la escuela austriaca a este desafío determinará no solo su relevancia futura, sino su compromiso con la búsqueda de la verdad económica por encima de la ortodoxia doctrinal.
El teorema de regresión de Mises, brillante en su momento histórico, requiere evolución conceptual para mantenerse relevante en la era digital. Esta no es una admisión de fracaso, sino una oportunidad para el crecimiento intelectual y la sofisticación teórica.




Estas sobreinterpretando a Mises sin realmente desmontarlo.
Estás declarando que Bitcoin “viola inequívocamente” el Teorema de Regresión, cuando Mises no exige que el “valor previo” de un medio de intercambio sea físico o industrial, sino simplemente que exista alguna forma de valoración previa en el mercado.
Y eso pasó, los primeros bitcoins tenían valor para los cypherpunks no por utilidad física, sino por su escasez digital y su potencial de uso. Esa expectativa es suficiente para generar un precio, y con eso ya hay “valor objetivo previo”.
Mises no restringe el valor previo a usos materiales. El texto de La teoría del dinero y del crédito dice: “El dinero debe tener un valor de intercambio antes de ser usado como tal”. No especifica que deba ser joyería o metal industrial, solo que exista una relación de intercambio anterior.
Bitcoin tuvo eso, los primeros intercambios eran prueba de que existía valor subjetivo y precios formados. Satoshi y Hal Finney negociaban bitcoins antes de las pizzas de Laszlo.
Confundís valor de uso con utilidad práctica física. La utilidad puede ser tecnológica (censura-resistencia, divisibilidad, escasez programada). En praxeología, toda valoración es subjetiva, el hecho de que no puedas tocar Bitcoin no lo hace inútil.
Es una categoría distinta de bien económico.
La paradoja de que alguien no podría estimar valor sin precios previos es falsa. Los precios emergen precisamente cuando alguien hace el primer intercambio. Mises describe un proceso regresivo hasta el punto en que alguien valoró el bien por otra razón. En Bitcoin, esa razón fue tecnológica y filosófica: escasez digital, soberanía monetaria, privacidad.
Comparar con Gödel es un exceso retórico, la analogía es llamativa pero no rigurosa. No estás probando incompletitud formal, solo señalando que el teorema necesita reinterpretación.
Rothbard enfatiza que cualquier bien puede ser dinero si es ampliamente aceptado, sin importar su uso físico previo. Rothbard en El caso contra el banco central ya abre la puerta a medios monetarios sin respaldo físico si el mercado lo elige.
Decir que el teorema “fracasa” es apresurado. Lo correcto sería afirmar que Bitcoin muestra que el valor inicial puede surgir de la expectativa de uso futuro en lugar de un uso físico. Eso no destruye el teorema; lo extiende.